Como indicador de trastorno del sueño
Invertimos alrededor de un tercio de nuestra vida en dormir, actividad fundamental que favorece nuestras funciones fisiológicas para el equilibrio psíquico y físico. Durante el sueño se restaura la homeostasis del sistema nervioso central. De igual modo, se fortalece nuestra memoria y se restablecen las secciones de energía celular. Pero… ¿Qué ocurre si tenemos problemas para dormir?
El insomnio es un estado de alerta que se desarrolla las veinticuatro horas del día produciendo complicaciones para dormir. Este estado modifica nuestro comportamiento promoviendo cambios de humor como irritabilidad, hiperactividad, impulsividad, agresión y daños cognitivos como falta de concentración y olvidos frecuentes. El sueño no reparador produce diversos trastornos que perjudican el bienestar personal y laboral. Cuando no es tratado esta condición por un especialista, por lo general, se intensifica y desata más adelante la depresión.
Las personas que tienen problemas para conciliar el sueño de forma prolongada suelen manifestar dolor de cabeza, despertares nocturnos o fin prematuro del sueño, malestar estomacal, problemas respiratorios y cardiacos. Es necesario que en el tratamiento del insomnio tengamos información objetiva y comprensible para entender la raíz de nuestro problema. Además, es necesario conocer las opciones terapéuticas que nos ayuden a tratar y prevenir posibles recaídas. Los trastornos del sueño no son una enfermedad grave en sí misma, pero propician serios inconvenientes en nuestra vida diaria como agotamiento físico e incapacidad para cumplir con obligaciones tanto profesionales como personales.
Dormir no es una tarea fácil para todos. Actualmente existen diversos trastornos del sueño y no todos ellos son conocidos. Las siguientes recomendaciones podemos ejecutarlas en casa para reducir los problemas relacionados con el sueño, en especial, el insomnio. No obstante, identificar los factores que están afectando nuestro cuerpo y nuestra mente deben ir de la mano con un enfoque multidisciplinario para su diagnóstico. (Conoce los tres trastornos que pueden afectar tu descanso)
Ancestrina recomienda…
- Ir a la cama solo cuando tengamos sueño.
- Evitemos hacer siestas durante el día de más de 30 minutos.
- Evitemos ir a dormir con hambre o sed, también en caso de estar muy llenos, recomendamos esperar media hora y retomar la disposición para dormir.
- Tomemos un baño con agua tibia antes de acostarnos.
- Acondicionemos nuestra habitación con una cama cómoda y acogedora; que el lugar posea una temperatura adecuada y un ambiente silencioso y de poca iluminación.
- Realicemos una rutina relajante antes de dormir, como colocarnos ropa cómoda y holgada o hacernos un masaje con aceites aromáticos en los pies y en las manos.
- Recordemos que la cama es principalmente para dormir, no hagamos uso de pantallas, como celulares, tabletas, laptops o televisores en la habitación.
- Mantengamos una misma rutina tanto para conciliar el sueño como para despertar.
- Hagamos ejercicios en el día, pero evitemos hacerlo por las noches, debido a su efecto estimulante.
- Eliminemos el alcohol, la cafeína, la nicotina y toda sustancia que afecte nuestro sueño.
- Recordemos que todo dependerá de cuán comprometidos estemos en mejorar nuestra salud y bienestar.
En Ancestrina aprovechamos las bondades del rapé como un tratamiento alternativo para trastornos del sueño como el insomnio. Si quieres saber más sobre esta herramienta ancestral, contáctanos en nuestras redes sociales.
